sábado, 16 de marzo de 2013

Así se hizo "Los chinos tang bien lloran"


ASÍ SE HIZO LOS CHINOS TANG BIEN LLORAN

Hay mucha gente que opina que ser actor-sombra chinesca es de lo más sencillo y divertido. Montones de jovencitas y de educados hombres de mediana edad sueñan con convertirse en sombras chinescas creyendo escapara así de una vida monótona y difícil. Pues tienen razón en parte.
En cambio en otra parte no tienen razón ninguna, pues las sombras chinescas también sufren sus dificultades. Sin ir más lejos en la filmación de Los chino tang bien lloran el duque de Chu sufrió quemaduras provocadas por los focos.
                                Ilustración 1: El duque de Chun convaleciente de sus quemaduras

Un caso más terrible fue el de Lu Pi-Tan (uno) que dejó este mundo de sombras para ir a otro en circunstancias no del todo aclaradas aunque con cierta intervención canina. O del Dios-Mono del que después de su fundamental aparición en escena no se volvió a saber nada ¿Habrá ido al Paraíso Occidental del las Diez Mil Muchachas en Flor o habrá sido aspirado en un acto de limpieza doméstica?
De todas formas en una filmación tan larga como esta hay momentos para todo: para esperar, comer, flirtear, cobrar e incluso bailar.

                         Ilustración 2: El dragón Cheng Cho dando cuenta de su ensalada diaria.

Como sabemos el dragón Cheng Cho participó este año en la campaña para sensibilizar a la población juvenil de la necesidad de comer verduras con el lema de “Come sano”. Algún periodista, con agudo sentido del humor, la llamó “Come al sano”. Una filmación es un cúmulo de anécdotas.

                Ilustración 3: Cheng cho y Sue Gla charlan distendidos a punto de entrar en el plató.

En los rodajes se convive durante mucho tiempo, como si fuese una familia, igual de terrible, así que se crean nuevas amistades, se descubren desavenencias. Sue Gla encontró a un gran admirador de sus chistes verdes en el bueno del dragón.

    Ilustración 4: Luben Da-Lio le da a Lu Pi-Tan un té.(repite rápidamente la frase y sabrás chino)

En las escenas en las que se los ve juntos algo brilla, verlos por los pasillos es ver florecer algo, Luben Da-Lio es en la vida normal una sombra no paraliticada, se trata de un atleta de triatlón y un gran poeta de la volcánica tierra de Ni Kar-A-Guam ¿Tendrá algo que ver con el inminente tercer divorcio de Lu Pi-Tan?

                             Ilustración 5: El Elen-Kong haciendo cola para cobrar.

Como tú y como yo las sombras chinescas también necesitan cobrar para vivir. Algo que la Ploductora Ching Chong olvida alguna que otra vez, convirtiendo en una auténtica carrera de locos el día que al fin sueltan los yuanes. Eso sí, consiguiendo con ello crear la simpática escena de las sombras a la carrera.

                                 Ilustración 6: El Mon-Tong de chinos baila en la disco


Y por supuesto siempre hay tiempo para disfrutar ¿y qué es la vida sin un buen baile? Así que, como casi siempre, lo dejamos bailando.

2 comentarios:

  1. No encuentro palabras para felicitarte por esta gran obra, si la serie está genial, los extras lo mejoran con creces, es decir sería otra película.
    Genial, excelente, te has superado......
    GRACIAS, GRACIAS, GRACIAS.....

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  2. Estoy con M.C. Espero coincidir alguna vez con el final del rodaje de algún filme inexistente en Eslavoina, porque la fiesta apetece.
    Uniéndome a los parabienes reciban un saludo de un espectador anónimo.

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